Aprende a decir lo que corresponde
Qué decir cuando te rompen el corazón

Qué decir cuando te rompen el corazón

De una forma u otra, a todos nos han destrozado alguna vez el corazón. Es un momento duro en el que uno/a no sabe qué pensar, qué decirle a la otra persona o qué decirse a sí mismo/a.

Todos hemos tenido o tenemos a esa persona en la vida. La que destruyó nuestro universo en pedazos. La que nos hirió más de lo que nadie nunca lo hizo. No importa cuanto nos alejemos de esa persona, el recuerdo de ese dolor todavía pervive. Todavía le damos vueltas al asunto y pensamos en las cosas que hicimos mal o bien, y qué podríamos haber hecho de forma diferente. Seguimos pensando en los buenos tiempos que precedieron a los malos. Sobre todo, pensamos en lo que le diríamos a esa persona si verdaderamente pudiésemos contarles de qué forma nos sentimos a este respecto. Hay mucho que se podría decir, pero la mayoría de nosotros podríamos empezar con una lista como esta:

1 – Me das asco.

2 – Me destrozaste.

3 – Me hiciste pensar que siempre y en todo momento estarías ahí.

4 – Mentiste, una y otra vez.

5 – Me hiciste creer en algo y después te lo llevaste todo.

6 – Nada te importó.

7 – Actuaste tal y como si te importase, pero fue otra patraña más.

8 – Malgastaste mi tiempo.

9 – Me causaste dolor.

10 – Me heriste.

11 – Me dejaste sola/o.

12 – Me dejaste creer que fue mi culpa.

13 – Me enseñaste a no confiar absolutamente en nadie.

14 – Me enseñaste a no confiar en mí.

15 – Jugaste a juegos que solo tú podías ganar.

16 – Monopolizaste mi mente.

17 – Me hiciste sentirme como alguien diferente.

18 – Me hiciste sentir débil.

19 – Me hiciste sentir vacío.

20 – Me hiciste llorar.

21 – Te rendiste en cuanto a nosotros.

22 – Te fuiste.

23 – Me merecía algo mejor.

24 – Nunca te necesité.

25 – Pensaba que no podía valerme por mí misma.

26 – Yo fui honesto/a.

27 – Creí en ti.

28 – Creí en nosotros.

29 – Me importaba lo nuestro.

30 – Dediqué tiempo a ello.

31 – Pensé que eramos felices.

32 – Fui ingenua/o.

33 – No capté las señales.

34 – No fui capaz de jugar a tus juegos.

35 – Pensaba que significaba algo.

36 – Aprendí que yo sí significaba algo.

37 – Aprendí que podía valerme por mí misma.

38 – Aprendí que era capaz de amar.

39 – Aprendí que no debía romperme.

40 – Supe que era mejor que eso.

41 – Ahora sé lo que deseo, y no eres tú.

42 – Soy una nueva persona

43 – Me reconstruí y fortalecí mi seguridad.

44 – Soy más fuerte debido a ti.

45 – Me siento seguro/a.

46 – Me siento feliz.

47 – No te odio.

48 – Te doy las gracias.

Siempre es importante recordarnos a nosotros mismos que, la persona que fue parte de nuestras vidas, lo fue por alguna razón. Puede que no haya sido el mejor capítulo de la historia de nuestra vida, pero sin ese capítulo, no seríamos quienes somos el día de hoy. A todo el mundo le rompen el corazón y sufre por amor en algún momento de su vida, y eso, en parte, es bueno. Ya que nos hace resistentes; nos hace fuertes. Nos recuerda que podemos avanzar incluso cuando creemos que nuestro mundo se ha terminado. Es bueno meditar sobre lo que le dirías a quien te rompió el corazón, pero es todavía mejor proseguir adelante y dejar atrás ese dolor y esa persona.